Sociedad

Comenzó el operativo calor

Desde el 1 de diciembre, 20 guardacostas patrullan a diario la costanera del río Ctalamochita para garantizar la seguridad en la temporada de verano. El equipo, formado principalmente por profesores de educación física y guardavidas, monitorea los sectores peligrosos y alerta sobre la seguridad de los niños y el consumo de alcohol en las playas.

Falta nada nada para el verano pero el operativo para la temporada ya comenzó: los guardacostas hacen lo suyo desde el domingo primero de diciembre y lo hacen todos los días, de una de la tarde a ocho de la noche, desde «El Arenero», en barrio Vista Verde, hasta el barrio Barrancas del Río.

Los guardacostas, entonces, hacen lo suyo: vigilan los dieciséis kilómetros de costanera sobre el río Ctalamochita. Son veinte y trabajan en duplas: una mujer y un varón. Hay, de todos modos, pocas excepciones: pocas duplas varón-varón. La mayoría son profesores de educación física: algunos recibidos hace años y otros son estudiantes de los últimos años de la carrera. Hay también, específicamente, guardavidas. Y en el grupo, hay jóvenes y no tanto: tienen desde veinticuatro hasta sesenta.

Luz Ladrón de Guevara, de treinta y tres, hace siete años que dirige el equipo. Durante la siesta de este domingo contó que se capacitaron con el cuerpo de Bomberos Voluntarios en el lago municipal y que aprendieron sobre técnicas de socorrismo, primeros auxilios, reanimación cardiopulmonar (RCP) y maniobras de rescate: persona-persona o con kayak.

“Vemos mucha convocatoria de gente ante estas temperaturas; todo el sector de la costanera completamente colapsado”, dijo. Y siguió diciendo que los guardacostas están atentos y alertan a los adultos porque “muchas veces los papás” dejan solos a los niños. “Algunos lo toman muy bien, son atentos a la indicación. Algunos otros, por ahí, hacen caso omiso”, mencionó.

Las zonas del «Cristo», las «Compuertas » y del lago son los “sectores peligrosos”. Ella explicó: “No están abiertas a toda la familia para que puedan ir a disfrutar porque no hay playas”. El caudal, aclaró, al ser mayor, es otro de los temas. “Hay que tener precaución”, insistió.

“Con ese tema no tenemos inconvenientes”, aseguró Ladrón de Guevara. Ese tema son los treinta y pico y la sed que aparece: la cerveza, la jarra de vino, de fernet. Las cervezas, las jarras de vino, de fernet. “Lo que es la zona del Santa Ana tiene mucha familia, mucha gente con niños. Por ahí hay alguna que otra playa donde asisten más los jóvenes”, dijo.