Pintamos Memoria: habrá una intervención en Plaza Independencia

"La actividad consiste en dejar plasmado en las veredas de la plaza el símbolo de la lucha por los derechos humanos. El pañuelo perdura, no solamente simboliza la lucha por Memoria, Verdad y Justicia", dijeron desde la Mesa por los Derechos Humanos de Villa María.

En el marco de las actividades de la Semana de la Memoria y a 49 años del golpe de Estado, la Mesa por los Derechos Humanos de Villa María organiza «Pintamos Memoria», una intervención en la que pintarán pañuelos y stencils en la Plaza Independencia el próximo sábado 22 de marzo de 9.30 a 12.30.

“La actividad consiste en dejar plasmado en las veredas de la plaza el símbolo de la lucha por los derechos humanos. El pañuelo perdura, no solamente simboliza la lucha por Memoria, Verdad y Justicia. No solo nos obliga a ejercitar la memoria, sino también a luchar en unidad y de manera colectiva; sobre todo en estos tiempos difíciles donde se promueve el individualismo, políticas de ajuste y reformas del Estado que impactan negativamente en la vida de millones de argentinos, en particular en los más vulnerables”, expresas desde la Mesa. 

La actividad convoca a familiares de víctimas de la dictadura, militantes y ciudadanos, entre la que se encuentra la hija de un militar que formó parte de los servicios de inteligencia del Plan Cóndor. 

“La repintada de los pañuelos se da en un ambiente muy ameno, familiar, de tristeza y de alegría al mismo tiempo. Se da una comunión entre los que participamos, porque nos sentimos contenidos, ejercitamos la memoria y la traemos al presente”, señalaron.

El pañuelo blanco, emblema de las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, es reconocido a nivel mundial como símbolo de lucha por los organismos de derechos humanos. En Argentina representa el retorno de la democracia y su defensa irrestricta, la búsqueda de juicio y castigo para los responsables de la dictadura y el acto de amor de quienes han dedicado su vida a encontrar a sus familiares desaparecidos y a los niños apropiados por la dictadura.

“La memoria y la historia de un pueblo no son cosas abstractas y congeladas en un pasado lejano. Las dos necesitan ser revisadas y debatidas en cada momento histórico para entender lo que nos pasa hoy”, destacaron.

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